Y la razón por la que ella esperó es porque tenía un arma secreta… una mágica poción de amor. Ella utilizó este efectivo brebaje para hechizar a Cesar, El Emperador Romano, y él ¡se convirtió en su amado esa misma noche!
(Cleopatra estaba muy lejos de ser linda, a pesar de su glamorosa imagen hoy en día. Ella es representada en las antiguas monedas con una larga nariz y rasgos masculinos). Si, ella era claramente una mujer muy seductora).
Años despues...
Cuando Cesar fue traicionado y asesinado por sus propios amigos, su sucesor en el trono fue Marco Antonio. La historia se repite sola...
Él también fue embrujado por esta gran poción de amor y se enamoró locamente de ella:
En el año 42 DC, Marco Antonio citó a Cleopatra en Tarsos (en nuestros días, Turquía) para preguntarle si ella había ayudado a sus enemigos. Cleopatra llegó en una barca con una popa dorada, velas púrpura y remos plateados.
El bote era navegado por sus criadas, que estaban vestidas como ninfas del mar. Cleopatra estaba vestida como Venus, la diosa del amor. Ella se reclinó bajo un dosel de oro, abanicada por hombres con trajes de Cupido.
Cleopatra lo entretuvo en su barca esa noche… Y como Cesar anteriormente, Marco fue cautivado. Olvidándose de sus responsabilidades, acompañó a Cleopatra a Alejandría y pasó el invierno allí con ella…
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